Todo me pesa, no sé quién soy ni como actuar frente a diversas situaciones. Me estoy volviendo apática a muchas cosas, a la vida, a las sonrisas, a la alegría. La soledad cada día me llama y me llama. No me agrada ir al colegio, es lo mismo todos los días. Me siento, escucho una clase, me levanto y me dirijo a otra aula para escuchar otra clase. Veo a las mismas personas participando en plenarias y a los mismos alumnos haciendo relajo, las chicas que necesitan atención de todos para sentirse bien, las que tienen actitud desafiante todos los días a cada momento, a los profesores que creen ser genios y conocer a la juventud actual, a los otros profesores que se quedaron con el antiguo método de enseñanza, a los alumnos que siempre se burlan de las personas, incluyendo a las religiosas de la institución, a las chicas que siempre tienen doble cara, las que creen que tienen el respeto de todos más no lo tienen, los chicos que solo se fijan en el físico y sólo piensan en deseos sexuales, a los que están "enamorados y encontraron al amor de su vida" con tal solo 15 años, a las que tienen pareja y se andan de un lado a otro besándose y abrazándose, a los que solo que tienen un gusto limitado por las cosas, las que se creen lindas, carismáticas pero realmente no valen nada, los que mienten y exageran todo siempre, los que se creen especiales, los chistosos que siempre cuentan los mismos chistes y aún así los pendejos se ríen de lo mismo y lo mismo, los que son apartados de la sociedad porque sienten que no encajan en ella, los que se creen farándula y tienen GRANDES amistades con personas de otro curso, los que engañan a los profesores con cosas idiotas, los que creen que insultando y maldiciendo son personas cheveres o los que se creen genio en todo. Las chicas que necesitan afecto especial de los chicos que llaman "mejores amigos", las que bailan coreografías "sanas" y terminan mostrando todo, las que les pesa la vida y se desquitan con todos, las que gritan para que todos las escuchen, las que se creen líder del grupo cuando lo único que hace es alzar el tono y mandar a cualquiera que se le pase por el frente, las que se creen lindas cuando por dentro no tienen nada de lindas, las que les vale madre todo, y, las que escriben para sacar su enojo y confusión.
Día a día encuentro por lo menos una de todas las categorías de personas que he mencionado anteriormente, y, por 11 años ver lo mismo, hacer lo mismo... cansa, y cansa a tal punto de que la vida te pesa, la vida te aburre. Nada interesante pasa, nada te anima, nada te mueve, nada te salva. Soy un caso perdido en la sociedad con sed de diversión y entretenimiento.
Hay momentos en que me pongo a imaginar lo maravilloso que sería aprender lo que realmente me gusta, lo que me apasiona... podría crear y crear y no parar de crear nuevas cosas. Abriría nuevas puertas, nuevos conocimientos.
Lastimosamente, es sólo un pensamiento más, dentro de este aburrido y apestoso ciclo.
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